¿Esto es (anti)democrático?

elroto

Cuanto menos bibliotecas públicas, mejor. Así, menos pobres tendrán derecho a la cultura: leer más.

Como no podía ser de otra forma, a menos cultura le corresponde más fuerza bruta: ver aquí.

El cabreo aumenta cuando nos enteramos de que los diputados no tienen dinero ni para internet. ¡Qué sería de ellos sin los cibercafés!

En un contexto de bipartidismo absoluto, o de pucherazo fundacional, en otras palabras.

Y todo bien aliñado con un puñado de decretos-ley que escupen en el Parlamento lo que debería de ser el poder de decisión de los ciudadanos.

PD: Artículo redactado gracias a la valiosísima información aportada por la Fundación Civio en su web elboenuestrodecadadia.com.

Deja un comentario

Archivado bajo Política

Declaraciones frente a datos

Cuando una noticia de televisión incorpora multitud de opiniones de distintas personas sobre un mismo tema, se pretende transmitir la (falsa) idea de pluralidad. Si, además, no se explica el contexto que da pie a dichas declaraciones, el ruido impide la comprensión de los hechos. El batiburrillo resultante es una pseudoinformación periodística clasificada dentro de lo que se conoce como periodismo de declaraciones, ese pseudogénero cultivado por los juntaletras vagos y dóciles (o en el orden inverso) para comer lentejas calentitas todos los días, con independencia del cargo al mando. Una noticia de TVE sobre el aniversario de la victoria electoral de Rajoy -a la tercera fue la vencida- muestra esta vieja técnica de manipulación por sobreexposición y descontextualización. Ver noticia de TVE (comienza en 06:40).

Por otro lado, existe una alternativa periodística que apuesta por el análisis de los datos primigenios. En este caso, el periodista no solo explica el contexto en el que se enmarcan determinadas declaraciones gubernamentales, sino que verifica dichas palabras, comparándolas con los datos y con la realidad social. El redactor de la información pasa a convertise en un periodista que desconfía de la versión oficial, buscando las contradicciones y los incumplimientos del programa electoral. Ver noticia emitida por La Sexta.

Deja un comentario

Archivado bajo Periodismo, Política, Televisión

Lo que Torres Mora ocultó a Zapatero

José Andrés Torres Mora fue uno de los consejeros ideológicos de José Luis Rodríguez Zapatero, además de su amigo personal; sin embargo, nunca le recomendó la lectura del libro «Puntos de reflexión. Manual del progresista», cuyo autor es George Lakoff; y si lo hizo, Zapatero no consideró pertinente su lectura.  Torres Mora escribió el prólogo cuando ejercía de diputado y miembro de la Ejecutiva Federal del PSOE. Quizás no se lo pudo recomendar porque él tampoco lo leyó.

Si lo hubiera leído, no habría permitido eslóganes ingeniosos al estilo ZP. Si lo hubiera leído, no habría permitido programas electorales «como listas de la compra» para no caer en la trampa de la «lista de propuestas». Si lo hubiera leído, también habría rechazado la idea del «centro» ideológico y habría trabajado en el biconceptualismo. Si lo hubiera leído, habría evitado la trampa del racionalismo, ya que los hechos por sí solos no convencen a los electores racionales. (Ver capítulo I, «Ganar o perder»).

Si lo hubiera leído, no seguiría hablando de «centro» y su partido no habría caído en la trampa del centrista, según lo define George Lakoff. El PSOE cree estar en el centro y lucha por conquistarlo, pero todavía ninguno de sus prestigiosos asesores -con máster en Harvard o familiar de algún cargo político- les ha contado que no existe.

Si lo hubieran leído, no caerían en la trampa del menosprecio, en la que, según el lingüista estadounidense, «los progresistas tachan a los líderes conservadores de incompetentes y poco brillantes».

Frente al hecho de que «los líderes conservadores mienten a menudo y usan un lenguaje orwelliano para distorsionar la verdad y, sin duda, los medios de comunicación se sienten cómodos repitiendo los marcos conservadores», el catedrático de lingüística y ciencias cognitivas sostiene que el líder, junto con su mensaje, ha de ser auténtico, es decir, mantenerse fiel a su ideología. No debe caer en la tentación del pragmatismo político no auténtico: abandonar unos valores a cambio de una ganancia política. Si el amigo de Zapatero lo hubiera leído, habría impedido a su amigo subir al púlpito del Congreso de los Diputados aquel 12 de mayo de 2010.

Dos años antes, Torres Mora escribía en el prólogo del Manual del progresista: «Quizá el peor de todos los errores sea asumir inconscientemente las ideas del contrario, volverse uno mismo un propagandista de estas» (págs. 14-15). A lo Pérez-Reverte, anticipó el desastre del PSOE, después de que Zapatero lo sepultara para hacer el trabajo sucio al Partido Popular.

Deja un comentario

Archivado bajo Periodismo, Política